Nuestra dignidad no se vende

Nuestra dignidad no se vende

A decir verdad, no recuerdo muy bien cuándo fue la primera vez que escuché eso de que Cabify pretendía trabajar con el Taxi.

De hecho, creo que Cabify ni fue el primero en hacerlo sino que la idea salió de Uber, nuestro otro enemigo y que tanto está haciendo sufrir al sector y a nuestras familias.


Uber, el otro enemigo mortal del taxi.

Porque para el que no se haya enterado, son nuestros enemigos. Enemigos que nos han subestimado desde el primer día.


De hecho, la última vez que nos subestimaron de verdad y los buitres (estos buitres) se presentaron atacando con sus mamporreros desreguladores, el taxi se plantó y le acabamos sacando al gobierno un Real Decreto. Un decreto por el cual ya se han ido tanto de Barcelona como de Valencia.


Y lo que queda, porque que os quede claro que con el taxi no se juega. Ni desde Holanda, ni desde Delaware, ni desde Hamburgo ni siquiera desde Tetuán.


Por otra parte, analizando la situación, creo que realmente tampoco hay que ser muy listo para saber que el parque de taxis en éste país es muy apetecible para estas empresas.

Y eso lo sabe tanto Uber, Cabify así como MyTaxi.

¿Qué os creéis que MyTaxi está quemando billetes por amor al arte con 70.000 taxis para poder parasitar?


Del mismo modo ¿Os imagináis que cualquiera de estas empresas se pudieran llevar el 20% de vuestra facturación?.  ¿De la facturación de cada taxi o de cada vtc?.


Porque por ahí se empieza… Por ahí se empieza y se sigue con lo de siempre o por lo menos con lo que todas y todos sabemos: Servicios asignados que se cancelan misteriosamente, servicios que se asignan por una supuesta preferencia de la app y no por proximidad, obligación de un mínimo de facturación, obligación de estar un número de horas conectado a la aplicación, cambios de normativa.


Porque seguramente, primero van a parasitar una parte de tu trabajo, luego te van a dar los servicios que ellos quieran para mas tarde exigirte como vas a tener que trabajar.


Y por supuesto, una vez copado el mercado van a ir a por la administración. Van a ir a por los Ayuntamientos, a por las Comunidades autónomas y a por cualquier organismo regulador porque probablemente si se da el caso de someternos tendrán menos argumentos para defendernos y nosotros tendremos menos razones para defender la autonomía de nuestro sector.


Y así, la normativa cambiará para favorecer a estas empresas. Y os aseguro que van a ir a machacarnos. Porque ya lo han intentado.


En principio, todo esto puede parecer un poco descabellado, pero no creo ir demasiado desencaminado. A día de hoy, miles de vtcs siguen sin dejar de operar veinticuatro horas siete días a la semana y aún así siguen sin dar beneficios.


Somos el último bastión y del mismo modo la puerta de entrada de los buitres.

Debemos grabarnos a fuego que si caemos nosotras y nosotros, si cae el taxi, detrás seguramente van a caer los demás servicios públicos.


Y lo mas grave de todo es que si caen los servicios públicos los principales perjudicados van a ser los y las usuarios y usuarias. Porque ellos son los que tiene derecho a disponer de estos servicios que se quieren quedar un par de empresas.


No podemos ponérselo fácil

Hay que mentalizarse desde ya de que el objetivo del taxi es seguir nuestro propio camino. Nuestro objetivo es luchar contra el camino que pretenden marcar los buitres, y Taxi Project 2.0 va a ser nuestra herramienta.


Contra Uber, contra Cabify y contra cualquier empresa que pretenda saquear los servicios de todas y todos.

Usuarias, usuarios, trabajadoras y trabajadores. Porque aunque ellos ya nos hayan puesto precio para conseguir el dinero de los inversores, la dignidad no se vende.

Tu taxi, el mío, el taxi de todas y todos. Hay que luchar, hay que seguir mejorando y trabajando.

No vamos a regalarlo al mejor postor

*Nota del autor

Mis opiniones son mías para eso la sección de la web donde se publica es un blog. En mi casa  nos han enseñado a respetar a todas y todos los compañeros y compañeras, a ayudar en lo que podamos y a no atacarlos y menos por decisiones en su trabajo.

Yo ataco a una empresa por las prácticas que creo a nivel personal que perjudican al sector a nivel general.

Nunca voy a atacar a un compañero por la decisión de trabajar para MyTaxi o para cualquier otra empresa.

Espero que quede claro.

Gracias

Carlos 1/30

2 COMENTARIOS

  1. Solo puedo decir que gracias por explicarlo tan claro. Enhorabuena por todo.

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